Un nuevo ataque de pumas en la zona rural de Conesa generó preocupación entre los productores agropecuarios. En esta oportunidad, un establecimiento sufrió la muerte de 23 ovejas y la desaparición de seis corderos, lo que representa una pérdida económica estimada en $1.150.000.
Según trascendió, los felinos ingresaron al corral durante la noche y provocaron un daño considerable. El productor afectado indicó que, por la magnitud del ataque, no se trataría de un solo ejemplar, sino de varios pumas cazando en conjunto.
Los ataques de esta especie, que anteriormente eran esporádicos, parecen haberse vuelto más frecuentes en el norte bonaerense, afectando la producción ovina y generando inquietud en el sector. Aunque no se considera que representen un peligro directo para la población, los productores advierten que la creciente presencia de estos animales en la zona plantea desafíos para la actividad ganadera.
Pese a la preocupación, la situación no cuenta con un marco normativo claro para realizar denuncias, por lo que los afectados deben asumir las pérdidas y convivir con esta problemática sin mayores respuestas.
