El Gobierno oficializó, vía decreto, la implementación del sistema de propinas digitales para varios sectores de la economía. El cambio entrará en vigor en 90 días, a partir de este miércoles 14 de agosto y “beneficiará a los trabajadores de los sectores gastronómico, turístico, expendedores de combustibles y actividades de reparto, aunque se prevé que en el futuro se sumen otros sectores”, según el texto oficial
A través del DNU 731/2024, se estableció que los comercios deberán contar con los elementos necesarios para que los consumidores dispongan de estas alternativas al brindar la propina.
El nuevo sistema no reemplaza la posibilidad de dejar propinas en efectivo pero obliga a los comercios y establecimientos de los sectores gastronómicos, hoteleros y afines a habilitar medios para que los consumidores puedan derivar dinero desde una billetera digital.
Las propinas deberán ser transferidas directamente a los trabajadores o a una cuenta designada para su beneficio, sin que haya tarifas o deducciones por parte de intermediarios. El sistema de propinas digitales deberá ser compatible con diversas plataformas de pago y las transferencias a los trabajadores deben realizarse dentro de las 24 horas. Asimismo, se permitirá que los trabajadores distribuyan las propinas entre sí y el Banco Central supervisará el cumplimiento del decreto, con sanciones para las violaciones.
A partir de esta decisión, las empresas de servicios de cobro deberán facilitar a los comercios la opción de recepción de pago con propina para que los consumidores puedan añadir un monto a la cuenta. Los consumidores podrán escanear cualquier QR y pagar con la tarjeta de débito, crédito o billetera virtual que elijan.
La medida no generará ninguna obligación impositiva a los comerciantes ni será considerada parte de la relación laboral: los comercios, las tarjetas de débito y crédito y los medios electrónicos de pago no podrán realizar retenciones o percepciones de ningún tipo sobre las propinas.
Según lo publicado en el Boletín Oficial, la medida busca abordar varios problemas, incluyendo el declive del efectivo, la ineficiencia del sistema actual, la modernización de los sistemas de pago y busca una compensación justa para los trabajadores.