
La Jefatura de Gabinete de Ministros sumó en las últimas horas dos designaciones centrales que terminaron de cerrar el armado del equipo más cercano a Manuel Adorni. Las decisiones quedaron oficializadas este lunes a través de decretos publicados en el Boletín Oficial, donde también se aceptaron renuncias y se agradeció a los funcionarios salientes por las tareas realizadas.
Una de las incorporaciones es la de Federico Esteban Sicilia, quien asumió como secretario de Coordinación Legal y Administrativa. El nombramiento se produjo tras la salida de Juan Manuel Gallo, cuya renuncia fue aceptada mediante el Decreto 882/2025, en el que el Gobierno destacó “los servicios prestados en el desempeño de dicho cargo”.
Sicilia llega a ese lugar como hombre de extrema confianza del vocero presidencial. Hasta ahora se desempeñaba como secretario administrativo en la Secretaría de Comunicación y Medios, y con su desembarco en la Jefatura también pasó a tener bajo su órbita el manejo de la Agencia de Acceso a la Información Pública (AAIP).
El otro movimiento relevante fue la designación de Ian Lionel Vignale como secretario Ejecutivo. A través del Decreto 881/2025, el Ejecutivo aceptó la renuncia de Nicolás Andrés Germán, con vigencia desde el 27 de noviembre de 2025. Al igual que en otros casos, se agradeció su labor en el cargo.
La llegada de Vignale tiene carácter retroactivo desde el 6 de diciembre y también responde a la lógica de fortalecer el núcleo duro con funcionarios provenientes de la Vocería Presidencial. Desde ahora, será el titular de una secretaría clave para la coordinación interna del Gobierno y tendrá bajo su responsabilidad la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) y la Corporación Puerto Madero.
Estos cambios se enmarcan en una decisión más amplia tomada por Adorni, quien resolvió eliminar las vicejefaturas y avanzar hacia un esquema basado exclusivamente en secretarías. A principios de mes, esa redefinición derivó en la salida del entonces vicejefe de Gabinete José Rolandi, un técnico que había ocupado el segundo lugar durante las gestiones de Nicolás Posse y Guillermo Francos.
Según trascendió, Rolandi había acercado distintas alternativas para continuar colaborando dentro de la estructura, pero ninguna terminó de convencer al actual jefe de Gabinete. El vínculo se dio por terminado y se inició una transición que desde el oficialismo describieron como ordenada.
En paralelo, otro nombramiento de peso fue el de Ignacio Devitt como secretario de Asuntos Estratégicos. Su presentación formal se dio en la última reunión de mesa política en la Casa Rosada, donde participaron el asesor presidencial Santiago Caputo, el ministro del Interior Diego Santilli, el titular de Diputados Martín Menem, la jefa del bloque libertario en el Senado Patricia Bullrich y el armador nacional Eduardo “Lule” Menem.
Durante ese encuentro se explicó que Devitt tendrá un rol central a partir de ahora. Además de coordinar las políticas de Defensa, Seguridad Nacional e Inteligencia, Adorni lo presentó como el futuro enlace parlamentario entre la Casa Rosada y el Congreso, una función sensible en el actual escenario legislativo.
Devitt cuenta con experiencia en el sector privado, con pasos por Philip Morris y Genneia, y también acumula recorrido en la función pública. Fue parte del Instituto de la Vivienda de la Ciudad, ocupó un cargo como director nacional en el Ministerio de Educación durante la presidencia de Mauricio Macri y fue concejal del PRO en el Concejo Deliberante de Vicente López.
En la práctica, se prevé que asuma las funciones que antes cumplía Rolandi, aunque ahora bajo el paraguas de su secretaría. Por ese motivo, se le transfirió la ex Secretaría de Relaciones Parlamentarias, que estaba en manos de Oscar Moscariello, quien, si bien aún no fue desplazado formalmente, no continuará dentro del Gobierno.
El fortalecimiento del vínculo entre Adorni y Devitt también quedó reflejado en otra resolución publicada en el Boletín Oficial. El jefe de Gabinete creó la Subsecretaría de Análisis y Planificación de Gobierno, un área inédita hasta ahora. Desde el entorno libertario cuentan que va a estar direccionada a auditar y coordinar al interior del Gobierno y admiten que durante la gestión de Francos hubo falencias en ese aspecto y que el objetivo es “volver a convertir a la Jefatura en una cartera de gestión y no en una política”.
En este mismo proceso de reordenamiento, se concretó además el traspaso de la Secretaría de Comunicación y Medios, que concentra la vocería presidencial y el control de las principales empresas de medios públicos, como APE (ex Télam), Contenidos Públicos y Radio y Televisión Argentina. Esa área quedó bajo la conducción del periodista Javier Lanari.
Por decisión del propio vocero, Daniel Scioli continuará al frente de la Secretaría de Turismo y Ambiente, que ahora pasó a depender de la Jefatura de Gabinete. El único recorte fue la quita del área de Deportes, que se transformó en subsecretaría y volvió al Ministerio del Interior conducido por Santilli.
Ese ministerio también recuperó el control del Renaper, un organismo que había sido transferido al Ministerio de Seguridad Nacional. La medida había generado polémica interna y finalmente se dio marcha atrás por pedido expreso del presidente Javier Milei.
Fuente: Con información de Data Clave



