El lema “María, vos sos nuestra esperanza” fue definido para las próximas fiestas patronales en el santuario de Nuestra Señora del Rosario de San Nicolás. La consigna surgió durante el Año Jubilar, tras un proceso de discernimiento comunitario, y expresa la confianza de los fieles en la Virgen como guía espiritual.
Las celebraciones se iniciarán a comienzos de septiembre con una serie de encuentros y peregrinaciones que convocarán a fieles de distintas localidades. El 6 de septiembre tendrá lugar el Jubileo diocesano de los niños, con concentración en la Plaza 14 de Abril y misa jubilar presidida por el obispo Hugo Santiago en el Campito. Ese mismo día por la tarde se sumará la peregrinación anual de la comunidad boliviana.
Los días 13 y 14 de septiembre se realizará la tradicional peregrinación Rosario-San Nicolás, con el santuario abierto día y noche. En la madrugada del 14 se celebrará una misa encabezada por el arzobispo de Rosario, Eduardo Martín. También llegará la peregrinación Pergamino-San Nicolás, con eucaristía presidida por el obispo diocesano.
El 24 de septiembre se desarrollarán las peregrinaciones desde La Emilia y desde Buenos Aires, que culminarán con misas y una vigilia de oración en el Campito. La novena patronal se rezará entre el 17 y el 25, con momentos destacados como el Rosario de antorchas previsto para el 20 de septiembre.
La jornada central será el 25 de septiembre, con el saludo a la Virgen a la medianoche, misas en distintos horarios, procesión, adoración eucarística y la misa principal presidida por monseñor Santiago en el Campito. El 27 de septiembre se celebrará además el Jubileo de los Servidores.
Desde la diócesis se remarcó que las fiestas patronales buscan renovar la esperanza de la comunidad y sostener el sentido de peregrinación como experiencia de fe compartida.
El Año Jubilar vigente fue convocado por el obispo Hugo Santiago, con motivo de los 40 años de las manifestaciones marianas en San Nicolás. Se trata de un jubileo diocesano, distinto del jubileo universal que proclama el Papa, válido solo para la comunidad local y orientado a intensificar la vida espiritual de los fieles.
