
El gobernador Axel Kicillof consiguió finalmente los votos necesarios para aprobar la ley de endeudamiento por más de US$ 3.500 millones, una herramienta que considera imprescindible para afrontar compromisos financieros y ejecutar el Presupuesto 2026. La Cámara de Diputados dio el aval poco después de las 3 h, y el Senado completó la sanción minutos más tarde.
La negociación se extendió durante varias jornadas y requirió un amplio acuerdo político con Fuerza Patria y bloques opositores —UCR, PRO, Unión y Libertad, y sectores dialoguistas— que incluyó la cesión de cargos estratégicos en organismos públicos, además de la creación de un fondo de recursos para los 135 municipios.
Reacomodamientos internos y reparto de poder
Antes de negociar con la oposición, Kicillof debió saldar tensiones dentro de su propio espacio. Para eso acordó un esquema de conducción rotativa en la Cámara de Diputados, que será presidida alternativamente por Alejandro Dichiara y Alexis Guerrera, representantes del cristinismo y del massismo. También se distribuyeron secretarías clave y conducción del bloque oficialista, que quedó en manos de Facundo Tignanelli.
Banco Provincia: el punto central del acuerdo
Como parte del entendimiento con la oposición, el gobernador habilitó el ingreso de nuevos directores en el Banco Provincia. Entre ellos:
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Matías Ranzini (PRO)
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Marcelo Daletto (UCR – Cambio Federal)
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Fernando Rozas (libertarios dialoguistas)
También se acordó renovar otros cargos con dirigentes ligados al massismo y a jefes territoriales del oficialismo.
Además, se habilitaron vacantes para sectores radicales en puestos jerárquicos del propio banco.
Más organismos incluidos en el pacto
El acuerdo también incorporó espacios en:
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Consejo General de Educación
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Tribunal Fiscal de la Provincia, donde existen ocho vacantes a cubrir
La discusión por los cargos pendientes en la Suprema Corte bonaerense quedó postergada y no formó parte del intercambio.
Un fondo para intendentes
Otro de los elementos que selló el acuerdo fue el compromiso del Ejecutivo de distribuir hasta el 8% del monto total del endeudamiento entre los municipios, lo que representa aproximadamente $350.000 millones. Ese reparto se hará en cuotas que se extenderán hasta mediados de 2027, garantizando un piso del 60% del total, incluso si la Provincia no ejecutara la totalidad de la deuda autorizada.



