
Por la Ruta 22, camino a Bariloche, en la provincia de Río Negro, se encuentra la ciudad de General Roca, el corazón del Alto Valle. Entre los aromas de manzanos, perales y viñedos, nació la historia de Antonio Tino Luisi: exjugador y director técnico que, tras más de 20 años vinculado al deporte, decidió dar un giro en su vida y reinventarse como músico y cantante.
Nació el 16 de octubre de 1963, en una familia de inmigrantes, creció entre los campos frutales de sus abuelos y la empresa constructora de su padre. Desde chico, compartía con su hermano mayor y los chicos del barrio una pasión inquebrantable: el fútbol.
“Fui goleador y campeón en el Deportivo Roca”
Esa pasión lo llevó a destacarse en las inferiores de Deportivo Roca. “A los 15 años fui goleador y campeón y al año siguiente debuté en primera división”, contó Tino.
Soñaba con ser profesional, y por eso se fue a probar suerte a Boca Juniors cuando Diego Maradona acababa de sumarse al club, pero no fue quedó. Luego intentó en San Lorenzo, donde una lesión le frustró el camino.
Regresó al Alto Valle y jugó en Unión Alem Progresista de Allen y Argentinos del Norte, hasta que una fisura de peroné volvió a alejarlo de las canchas. Más tarde, estudió profesorado de educación física en Viedma y regresó a su ciudad para seguir vinculado al deporte.
El hombre que fundó un club, formó a cientos de chicos y volvió a jugar a los 48 años
En 1993 fundó su propia escuela de fútbol: Potenza, que con el tiempo se convirtió en un club muy reconocido en la región. Bajo su liderazgo, no solo formó a cientos de chicos, sino que también compitió en torneos locales, consiguiendo títulos y premios al juego limpio.
En 2011, el club debutó con cancha propia y al año siguiente se consagró campeón en tercera división. En un acto que llamó la atención de toda la prensa local, Tino volvió a jugar a los 48 años y convirtió un gol, lo que lo transformó en uno de los jugadores de mayor edad en marcar en un torneo afiliado a la AFA.
Cuando el sueño del club terminó, Tino encontró en el arte una nueva forma de vivir
Sin embargo, los esfuerzos no fueron suficientes para sostener la institución, y en 2014 Potenza se retiró de la liga. La escuela continuó un tiempo más, pero tras la pandemia cerró definitivamente. “Fue un golpe muy duro”, contó Tino.
Después de más de 20 años dedicados al proyecto, encontró refugio en el arte. Primero con la fotografía, que lo llevó a publicar su libro “Mirándote”, una obra que combina imágenes y frases de su autoría. El aislamiento despertó su sensibilidad artística, que encontró un nuevo cauce: la música.
El primer disco de 18 canciones
Encerrado en su casa y con mucho por decir, Tino tomó su guitarra y comenzó a escribir canciones. Fueron 18 en total, nacidas de experiencias propias, de su imaginación y de personas importantes en su vida.
Se perfeccionó en el canto y tres años después comenzó a grabar esas canciones junto al músico Juan Pablo Márquez. En octubre de este año lanzará oficialmente su álbum titulado “Luminia”, un trabajo que mezcla baladas, rock, pop, bachata y otros géneros, en el que volcó su alma entera.
El debut como cantante que emocionó a todos
Su pasión por el escenario se hizo realidad el sábado 24 de mayo. Se subió por primera vez a un escenario como cantante, acompañado por la banda de rock “Yubes”, integrada por exalumnos suyos de Potenza, y por su profesora de canto, Mery Ceballos, quien lo acompaña en los coros y lo apoya en este nuevo desafío.
Tino Luisi, aquel pibe del potrero, el DT, el profe, el formador, hoy se reinventa como artista, demostrando que nunca es tarde para volver a empezar, cuando el corazón llama a vivir con pasión.
Fuente: Con información de TN