Tras conocerse el 11% de inflación en marzo, los precios experimentaron una fuerte desaceleración en la primera quincena del mes y el índice general podría regresar a un dígito durante abril. Así se desprende de las mediciones de alta frecuencia de distintas consultoras, abonando los pronósticos del gobierno de Javier Milei sobre la dinámica inflacionaria.
A juicio del ministro de Economía Luis Caputo, el sendero de caída del costo de vida responde a la implementación de una batería de medidas que tienen como norte el equilibrio fiscal y la recomposición de reservas internacionales del Banco Central de la República Argentina (BCRA).
Si bien el apretón monetario y la estabilidad de los tipos de cambio surtieron efecto sobre los precios de la economía, existe consenso entre los economistas acerca del rol preponderante que desempeña la recesión como factor moderador de la inflación.
Al resentirse los salarios y, por ende, el poder adquisitivo de los argentinos, se reduce el consumo y los consumidores dejan de convalidar los aumentos. En consecuencia, la contracción de la demanda fija un techo a las remarcaciones de los productos y desacelera del proceso inflacionario.
Inflación de abril: cómo evolucionan los precios
EcoGo informó que en la segunda semana de abril los alimentos registraron un incremento del 0,2%, marcando un considerable descenso respecto a las semanas previas. “Con este dato y considerando aumentos proyectados para las semanas restantes del 1,3%, la inflación en alimentos consumidos dentro del hogar ascendería a 5,4% en el abril”, aseguraron.
En tal sentido, la firma de la economista Marina Dal Poggetto proyectó un nivel general de precios de 8,9% para todo el mes: “La baja en la proyección respecto a la semana previa responde a un dato de inflación en alimentos considerablemente menor al esperado, junto con escasas subas en el resto de los rubros, lo que lleva a modificar a la baja nuestras proyecciones para las próximas semanas”.
Por su parte, la fundación Libertad y Progreso midió un aumento de 9,5% mensual en la primera mitad de abril, desacelerándose 1,1 puntos desde el 10,6% anotado al cierre de marzo. De esta manera, se traduciría en una reducción de 1,5 puntos porcentuales en relación con el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo, que se ubicó en 11%.
“En la segunda semana de abril la variación fue del 0,4% semanal, el registro más bajo en 6 meses. Hay que remontarse hasta octubre de 2023 para encontrar una suba similar. De esta manera, proyectamos que la suba del IPC LyP en abril se situaría en el 9%, siendo la primera variación de un dígito desde octubre del 2023″, indicaron.
Inflación de abril: los pronósticos de los economistas
El economista de la organización liberal, Emilio Prado, sostuvo que “si bien la inflación de abril estará explicada en mayor medida por el aumento de precios regulados, los otros bienes de la economía presentan una dinámica en desaceleración como lo muestra la segunda semana del mes y reflejada en la inflación núcleo en torno al 7% mensual”.
“Hacia adelante, esperamos que el ritmo de aumento de los precios, en promedio, sea cada vez menor. La velocidad de la misma dependerá de que el Banco Central continúe con su austeridad de emisión y que el compromiso por alcanzar un déficit fiscal cero se consolide con el correr de los meses. En ese sentido, un escenario legislativo que acompañe una reforma fiscal será una mejor alternativa frente a la actual licuación de los pesos”, agregó Prado.
Para LCG, la segunda semana del mes cerró con una inflación de 0,2% en alimentos y bedidas, el registro más bajo desde julio de 2023. A la vez, la medición experimentó un retroceso de 0,2 pp. en la comparación semanal. Así, la suba acumuló un 0,6% en la primera quincena.
El indicador hilvanó cuatro semanas consecutivas con una dinámica inflacionaria por debajo de 1%. “La suba promedia 6,2% en las últimas cuatro semanas y 2,1% punta a punta en el mismo período”, explicaron los autores del informe.
Hacia adentro del reporte, sólo anotaron incrementos cuatro de las diez categorías: productos lácteos y huevos (4,2%), condimentos y otros productos alimenticios (1,1%), bebidas e infusiones para consumir en el hogar (0,6%) y carnes (0,4%).
Por el contrario, frutas (-0,1%), aceites (-1,5%), verduras (-1,8%), productos de panificación, cereales y pastas, del (-2,2%), y azúcar, miel, dulces y cacao (-3,3%) arrojaron deflación. En otras palabras, los precios de los productos mencionados decrecieron.
En tanto, C&T Asesores Económicos difundió una inflación de 0% en la segunda semana del mes corriente. “En alimentos y bebidas nos dio una caída total de 0,4% y cuando se mira los alimentos en particular, los que se consumen en el hogar, dio una caída del 0,8%”, explicó la directora de la consultora, María Castiglioni Cotter, en diálogo con Canal E.
Bajo la perspectiva de la economista, al no convalidarse un escenario de dólares financieros al alza y con el tipo de cambio oficial avanzando a un ritmo mensual de 2%, “estamos viendo en el mes de abril es una desaceleración marcadisima en la inflación núcleo”, que no tiene en cuenta a los precios regulados ni estacionales.