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Una comerciante debió investigar por su cuenta el robo de su local

La propietaria de un comercio de barrio Santa Rosa reconstruyó por su cuenta el robo que sufrió. Enfrentó demoras para radicar la denuncia y no recibió pericias; además, reunió imágenes de cámaras vecinales para aportar pruebas sobre los presuntos autores

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Una comerciante de barrio Santa Rosa relató el robo que sufrió en su local durante la madrugada. Jessica, una de las dueñas del comercio ubicado sobre calle Sáenz al 700, contó en una entrevista concedida a “La Primera Mañana” que el hecho ocurrió «ante noche, a las dos de la mañana».

Según explicó, los autores «rompieron el vidrio», «sacaron la reja» y lograron ingresar al local. Señaló que los intrusos se llevaron una computadora, termos y otros artículos de valor que fueron advirtiendo con el correr de las horas. Recordó también que el emprendimiento está en sus primeros pasos: «Estamos recién empezando, no somos muy conocidas en la zona y la economía está difícil para todos».

Tras el ataque, reforzaron la seguridad del local. «Ya pusimos el Blindex para que no lo vuelvan a romper, que salió 400.000 pesos, y la reja 200.000; nos salvaron las tarjetas», dijo. También cuestionó la demora institucional: relató que radicar la denuncia llevó casi dos horas y que su socia «estuvo esperando» en la Comisaría Segunda. Contó que les informaron que Policía Científica las contactaría, pero «no tuvimos ninguna novedad», por lo que repararon los daños sin pericias.

Frente a la falta de avances, consiguieron imágenes de cámaras de seguridad aportadas por vecinos. En una de ellas se ve «a dos corriendo», quienes serían los presuntos autores. Jessica sostuvo que los habitantes del barrio se organizaron y continúan reuniendo material para intentar identificarlos.

También cuestionó la falta de patrullaje nocturno. «Después de las dos de la mañana acá se corta lo que sería la recorrida policial. De día se suele ver, pero a la madrugada, ya no», aseguró. Agregó que otros comerciantes mencionan un accionar similar y describió que «son dos personas, uno por la calle y otro por la vereda» que rompen el vidrio y toman lo que pueden.

La comerciante señaló que la inseguridad afecta a comercios, viviendas y motos, especialmente en el sector posterior del barrio. «De dos a cinco de la mañana tienen tranquilo para salir a hacer desastre», expresó. Relató que el local quedó desordenado, con elementos descartados en la zona, como el mouse de la computadora y una crema.

Dijo que esperan acceder a más cámaras para llevar el material a la comisaría: «A ver si hacen alguna actuación, porque no nos han llamado ni ha venido Científica, nada como nos dijeron».

Finalmente, reclamó mayor presencia policial en horario nocturno. «Nos roban, nos ayudamos entre vecinos, las cámaras las conseguimos entre vecinos y la investigación también. No debería ser así», concluyó.

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