Historias

Colonia Hinojo, el primer asentamiento de alemanes en el país: El pueblo bonaerense para comer kreppels, varenikes y strudel

A un puñado de kilómetros de la ciudad de Olavarría, los 2700 habitantes de esta localidad muestran sus raíces de los alemanes que llegaron desde la aldea Kamenka a fines del Siglo XIX para instalarse y quedarse en Argentina.

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A 19 kilómetros de la ciudad de Olavarría, nos encontramos con Colonia Hinojo, el primer asentamiento de alemanes en el país. Este pintoresco pueblo bonaerense, conversa la cultura de los europeos que llegaron desde la aldea Kamenka, a orillas del río Volga, en Rusia.

Por la ruta 226 se ingresa al poblado de 2700 habitantes. Un hermoso boulevard flameado por palmeras da la bienvenida al visitante. En 1883 llegó el ferrocarril a la estación Hinojo y el primer impulso a esta comunidad que se estaba formando.

El nombre “Hinojo” se debe a la cantidad de plantas de esta especie que habitan en el lugar. Crece en zonas templadas, es aromática, dulce y es utilizada tanto en gastronomía como en medicina.

La fiesta tradicional de este pueblo, el recuerdo de la cultura Volga, sucede aproximadamente entre marzo y abril en la célebre Kreppelfest.

En este evento tradicional se repasa la historia del pueblo, sus bailes tradiciones y sus comidas típicas como kreppels, varenikes y strudel o tortas rusas como la riwwel kuchen.

La gastronomía justamente es una de las atracciones de Colonia Hinojo. Conservas, dulces, budines, tortas y platos típicos permiten degustar un almuerzo, cena o merienda y remontar a los visitantes a las exquisiteces propias de la comida de este país europeo.

Como puntos de interés se destaca además la plaza principal José de San Martín que tiene un tablero de ajedrez pintado en el piso de 5 metros de cuadrados.

La Parroquia Natividad de la Santísima Virgen, el Museo Municipal de los alemanes del Volga “Ariel Cherico”, el anfiteatro, o el primer Almacén de Ramos General de Lorenzo Lassalle, fundado en 1885, son otros sitios de interés.

Además, al recorrer el pueblo, se van encontrar con un réplica del submarino Ara San Juan en homenaje a los 44 tripulantes fallecidos.

Esta simpática colonia aún conserva algunas casas hechas en piedra, de las primeras construcciones, dado que una de las actividades originarias estuvo vinculada al cemento, producción de adoquines y cordones.

En síntesis, este rincón bonaerense ofrece los vestigios de la primera colonia alemana instalada en la Argentina.

Fuente: Con información de La Noticia

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