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Peligra la continuidad de “la feria de la estación”

Tras la demolición de la terminal de ómnibus, crece la preocupación de los puesteros. A pesar de las reuniones mantenidas con el municipio, aun no está claro el destino de esta actividad económica que sostiene a más de veinte familias

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En la feria de productores ubicada sobre Avenida Morteo al 100 se comercializan frutas, verduras, carnes, lácteos y panificaciones. Fue inaugurada en septiembre de 2008 a través de un proyecto de ordenanza.

Si bien durante más de 10 años tuvo su época de esplendor con 36 feriantes y una concurrencia de 5 mil personas por fin de semana, desde la organización visualizan un notable retroceso.

“En su momento fue novedoso para San Nicolás y nos resultó muy difícil sostenerla por tanto tiempo. Desde hace cinco años el municipio se apoderó de la feria y se encargaron de ir desgastándola”, sostiene Sergio Leiva, una de las personas que comenzó con el proyecto.

Además, Leiva señala una serie de acontecimientos que, según argumenta, hicieron que la feria se encuentre en un momento crítico: “Subieron los cánones a precios exorbitantes, hay personas que pagan doscientos mil pesos por mes. Lo último que hicieron fue demoler la estación. Los colectivos que antes estacionaban en la terminal ahora lo hacen en el playón de la estación de trenes, por lo tanto los nicoleños que iban a comprar a la feria no tienen lugar para dejar los autos. Por este motivo y por la situación actual del país se perdieron ventas, se empezaron a ir feriantes y ahora son 24”.

En diálogo con Leiva, se supo que el municipio sostiene que el lugar quedó desfasado con relación a cómo se está desarrollando San Nicolás. Por este motivo, desde el organismo se mantienen una serie de encuentros con representantes de la feria para definir cuál será el destino. “En la reunión que hubo la semana pasada el director de Contralor citó a los feriantes porque el 70 por ciento debe el canon que se cobra. También se les informó que una de las opciones es sacar la feria de ese lugar porque el espacio quedó abandonado”.

Por estos días, los feriantes están a la espera de que continúen las negociaciones, ya que la situación está “agarrada de un piolín”, como la describen.

“No queremos irnos porque consideramos que es un lugar estratégico. Cuando nosotros nos hicimos cargo, estaba todo abandonado. Hubo charlas con el ONABE (Organismo Nacional de Administración de Bienes del Estado) y lo recuperamos”, manifiesta Leiva.

A lo largo de estos años y contra todo panorama desalentador, la feria frutihortícola logró consolidarse en la ciudad. Funciona los días sábados y domingos de 8:00 a 13:00 en el predio de la estación de trenes. Actualmente trabajan 24 emprendedores y concurren alrededor de 500 personas por fin de semana.

Antecedentes

La feria se inauguró en septiembre de 2008 durante la intendencia de Marcelo Carignani. Contó con el apoyo de José Villaruel, director de Empleo de ese momento, y del gobierno nacional.

Por aquellos años, el municipio concedió a la cooperativa frutihortícola un terreno de 11 hectáreas comprendido entre las calles Reynoso, Dámaso Valdéz, Rucci y Del Pozo para que se desarrolle la actividad. Además, en el lugar se producían semillas para el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).

“Luego de 15 años, de un día para el otro, el municipio presentó el proyecto para construir el estadio de fútbol, hubo un desalojo y nos desmantelaron todo”, concluyó Leiva.

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